Por: Fredy León Gómez Álvarez

El sector educativo colombiano fue sorprendido esta semana con un anuncio sin precedentes: la Fundación Universitaria Unigermana obtuvo de manera simultánea dos de las certificaciones internacionales más exigentes del mundo —la ISO 21001, exclusiva para instituciones educativas, y la ISO 9001, referente global en gestión de calidad— un logro alcanzado solo por un reducido grupo de entidades en el país.

Pero, más allá del rigor técnico, lo que ha generado mayor impacto es la historia humana que acompañó el proceso y que, según auditores y expertos, se convirtió en una de las evidencias más contundentes del modelo institucional: la historia de Carmen Navas, una mujer que perdió la visión a causa de un tumor cerebral y que encontró en Unigermana y el Instituto Nacional para Ciegos (INCI) una oportunidad para reconstruir su vida.

Una mujer, una transformación y la evidencia que marcó la diferencia

El caso de Carmen —que hoy adelanta un proyecto de emprendimiento social tras recibir acompañamiento académico, emocional y técnico— fue mencionado informalmente por los equipos de auditoría como un ejemplo irrefutable de que Unigermana no se limita a cumplir protocolos: demuestra impacto real, verificable y sostenible en poblaciones históricamente excluidas.

Su proceso de recuperación, adaptabilidad, formación y reinserción económica no solo se convirtió en un testimonio de resiliencia, sino en un indicador vivo de que la inclusión, dentro de esta institución, trasciende los documentos y se materializa en resultados medibles.

ISO 21001: evidencia de un modelo educativo centrado en el estudiante

La certificación ISO 21001 exige pruebas verificables de:

• accesibilidad académica en contextos complejos,
• adaptación de materiales y métodos,
• trazabilidad educativa,
• procesos de mejora continua,
• acompañamiento especializado a estudiantes con discapacidad.

Los auditores señalaron que el trabajo conjunto entre Unigermana e INCI, la adecuación de currículos para estudiantes con discapacidad visual y la consolidación de proyectos productivos surgidos de estas alianzas fueron factores decisivos para la certificación.

ISO 9001: excelencia en gestión y calidad institucional

La obtención paralela de la ISO 9001 confirma que la universidad cuenta con sistemas sólidos de:

• control documental,
• atención al usuario,
• procesos administrativos estandarizados,
• análisis de riesgos,
• y gestión integral auditada bajo parámetros internacionales.

En este proceso, los auditores resaltaron que la articulación con entidades como el INCI no solo fortalece los indicadores de calidad, sino que demuestra una filosofía institucional centrada en lo humano, capaz de generar cambios tangibles en la vida de sus estudiantes.

“Un punto de quiebre en la historia de la institución”

Para Juliana Lesmes, representante legal de Unigermana, la doble certificación es “el resultado de meses de trabajo, inspecciones externas, revisión de protocolos y análisis continuo”. Pero destacó que la clave no fueron los documentos, sino las historias de vida:

“Lo que más llamó la atención de los auditores fue la manera en que procesos reales, como el de Carmen, demuestran que nuestros modelos de acompañamiento funcionan y transforman vidas.”

Un debate nacional: inclusión real vs. inclusión declarativa

Expertos consultados afirman que este logro deja en evidencia algo más profundo: la brecha entre instituciones que demuestran inclusión con resultados verificables y aquellas que la mencionan únicamente en discursos o documentos.

La alianza entre Unigermana y el INCI, junto con testimonios de transformación personal y económica, está generando preguntas clave en el sector:

• ¿Qué tan efectiva es la inclusión en la educación superior colombiana?
• ¿Cuántas instituciones pueden demostrar impacto medible en poblaciones vulnerables?
• ¿Debe el país exigir estándares internacionales para validar procesos inclusivos?

Un precedente que podría reordenar el panorama educativo

Analistas consideran que este anuncio podría configurar cambios significativos, entre ellos:

• aumento de confianza de estudiantes y familias en la educación técnica,
• presión para que más instituciones adopten estándares verificables,
• mayor rigor por parte de entidades de control,
• fortalecimiento de modelos educativos con impacto social real.

La doble certificación coloca a Unigermana en el centro del debate nacional y abre un nuevo capítulo sobre el verdadero alcance de la inclusión en la educación superior.